La víctima violenta

A tan solo unas horas de que comience un suceso que para mi es una batalla, se me ocurren algunas reflexiones.

No cabe duda que la edad no justifica la falta de sobriedad, gente que trata de buscar un pretexto para actuar como retrasados mentales y ruegan ser aniquilados. De una u otra forma dentro del organismo siempre queda un mecanismo de limitación de daños, y el inconsciente es un medio por donde ese mecanismo encuentra su forma de expresión.
Literalmente van con su encuentro a la erradicación, sólo necesitaron encontrar al agente correcto.
La busqueda de placer es su constante, la disfrazan de ayuda a los demás, de altruismo, de trabajo colectivo, y todo para qué? para la satisfacción.
Desde los más simples hasta los más torcidos. Confunden la ambición con la cantidad de placer atendido y no se dan cuenta que lo único que están logrando es activar ese sistema de defensa natural.
Qué la vida es muy dura? qué hay injusticias? qué hay gente mejor que otra?, si, siempre la habrá, pero eso no es justificaciòn para el embotamiento.
Piensan que por pertenecer a alguna agrupación o por adoptar sistemas nobles y corromperlos, están encontrando el oro necesario para sus vicios y se les olvida una cosa
constancia
Dirían que no se trata de magia, sino de equiparse, de entrenar, de entrenar y de entrenar.
Y solo faltan unas horas…
Y siguen en su papel de pobres víctimas, con reclamos insurgentes
A todos ellos: No se les olvide que no se trata de ser el ajusticiador, ni el justiciero. Solamente se llega uno a convertir en agente de la naturaleza.
Y si no les gusta, no clamen por ser eliminados y solamente hagánse a un lado. Hay gente que tiene pureza de propósito en lo que hace, y su objetivo va más allá de tener un Aston Martin, o de publicar miles de libros.

4 Commentsto La víctima violenta

  1. Lux dice:

    A veces deshacerse en justificaciones, no necesariamente justifica los fines.
    Hay un punto en donde las quejas solo reflejan la falta de claridad de propósito.

  2. Banned Chipola dice:

    Hay cuestiones que van más allá de los hechos. Y digo esto porque se ha presentado el caso de personas que después de ver de lo que es capaz una persona, no le queda de otra más que escapar con la cola entre las patas, seguir en su papel de incoherente o agachar la cabeza.
    Podría ser peor, podría tratar de tener una fachada de tranquilidad, de “no pasa nada” y seguir en los mismos actos.
    Y no se trata de víctimas y victimarios, simple y común sentido.
    Si defiendes algo por que:
    1.- Te gusta.
    2.- Has jurado defenderlo.
    3.- Tienes una deuda con ello.
    Es lógico la reacción devastadora que vas a tener cuando ese algo (idea, concepto, persona o lo que sea) se ve amenazado.
    El límite es no caer en extremos fundamentalistas. Es decir, tengo una idea, un modo de vivir, y no por ello voy a imponerles a otros las cosas como las veo. Si quiero o no estar abierto a otras posibilidades es decisión propia, es de mi libre albedrío si vacío o no mi taza, para que sea llenada de algo más nutritivo o algo más inútil, y yo mismo pongo el límite de llenado.
    Discrimino, limito, y uso. O en otras palabras, Apunto (que quiero), Renuncio (que no quiero), Ordeno (cuanto quiero) y Separo (esto me sirve y esto no).
    Si no puede ocurrir que ante los hechos reales, me cierre y diga: Como yo tengo acceso a un conocimiento superior, tu eres inferior y todo lo que digas no sirve.
    Si lo que dices está basado en la ficción, en el engaño, en suposiciones, en beneficio propio (económico, o de placer) estoy en mi derecho de refutarlo, y si insistes, de bloquearlo y destruirlo.
    La libertad es eso, ser capaz de aplicar A.R.O.S para no ser una víctima ni un victimario
    El límite a mi libertad debe responderme: si continuo con estos actos no terminaré pidiendo clemencia?

  3. Dark Crow dice:

    Fuerza…

  4. admin dice:

    Cuando eliges no ser victima ni villano, te conviertes en la tercera opción.