Mueren tres amigos en un accidente, dos españoles y un ruso, y llegan al cielo.

San Pedro los recibe y les dice:

– En el cielo tenemos solo una norma: No pisen a las palomas.

Entran en el cielo y… esta lleno de palomas por todas partes. Es casi imposible moverse sin pisar alguna y aunque intentan evitarlas, al poco rato uno de los españoles pisa una por accidente.

Al momento se presenta San Pedro con la mujer mas fea que se puedan imaginar y la encadena con unas esposas al pobre españolillo:

– Por haber pisado una paloma, estas condenado a pasar el resto de la eternidad encadenado a esta horrible y fea mujer.

Al dia siguiente, otro de los amigos y para variar españolillo tambien, pisa accidentalmente otra paloma. San Pedro, al que no se le pasa una, aparece en menos de lo que canta un gallo con otra mujer terriblemente fea y los esposa juntos para siempre.

El tercero, nuestro amigo ruso, viendo la seriedad del asunto, pone todo el cuidado del mundo y consigue que los meses vayan pasando sin haber pisado ninguna paloma.

Un dia sin embargo, sin haber pisado paloma alguna, se le presenta San Pedro con un bombon digno de las paginas centrales de Playboy: una rubia impresionante, alta, tostada por el sol y con unas curvas de escandalo.

Sin decir palabra, los encadena juntos y se larga.

El ruso, alucinado, dice :

– Me pregunto que demonios habre hecho para que me encadenen a ti.

– Yo no se tu… -dice la chica- pero yo acabo de pisar una de las palomas