Las dos validaciones

Una de las cosas mas interesantes del modelo estructural del primer libro, es la repetición de la idea que ciertas cosas deben obtenerse y validarse, incluyendo la regla, tanto en la realidad ordinaria y la no ordinaria (consensuada y no consensuada).

Si no puedes validar algo en la realidad ordinaria, menos en la no ordinaria. Y es un paso previo la realidad ordinaria.


Una de las cosas mas interesantes del modelo estructural del primer libro, es la repetición de la idea que ciertas cosas deben obtenerse y validarse, incluyendo la regla, tanto en la realidad ordinaria y la no ordinaria (consensuada y no consensuada).

Si no puedes validar algo en la realidad ordinaria, menos en la no ordinaria. Y es un paso previo la realidad ordinaria.

Cuando en el arte de ensoñar le dice Don Juan a Carlos Castaneda que “el desafiante” le enseñó a Julián como mover el putno de encaje para convertirse en mujer (innecesario, técnica para reclutar personas con preferencias sexuales diferentes, pero sin valor práctico en el mundo real y en contra de varios sistemas tradicionales), lo pone frente a un ejemplo de imposibilidad de validar (¿como podía validar eso el grupo de Julián? ¿para qué?)

Lo mism ode respirar por la vagina de los libros de Tsisha Abelar. No tiene sentido prñactico ni es validable.

Si la misma existencia de Don Juan no es validable, no es suficiente que “yo la valide en la segunda atención”.

Y sin embargo, usar la realidad ordinaria para validar es paso previo, tanto del sistema de “unidad estructural” como para el mundo de todos los días. Y las mentiras pinches(Don Juan Dixit) no pasan tampoco el filtro de la unidad estructural (ni de la ética ni del sentido común)

Por lo mismo, usar la segunda atención como prueba de validez, al mismo tiempo invalida el sistema completo.

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