Distrito 9

Me diverti como enano con esa pelicula. Como pelicula de ciencia ficcion les puede dejar el estomago revuelto a varios por la situacion apartheid que se muestra y la critica social que hacen con varias escenas que recuerdan mas a peliculas relacionazdas con el racismo y sus excesos. A mi parecer es mas una pelicula sociologica con buenos efectos especiales. =P
Bendito sea que no todos los extraterrestres aterricen en EUA. Me recuerda lo que decia Oscar Arredondo. La razon por la cual ninguna especie extraterrestre aterriza aqui es por la mala leche humana y por que nadie en su sano juicio llegaria a un mundo donde apuntan sus armas nucleares a su propio planeta. En cierto modo tambien me recuerda la novela de ensayo sobre la ceguera, en donde se muestra lo mejor y lo peor del hombre.
La pelea final bastante bien lograda para el presupuesto que tenian (30 millones). Ya quisiera iron man esa armadura. A mi parecer fue bstante espectacular el final, conforme el prota iba cambiando de forma curiosamente se iba humanizando mas.
De las cosas interesantes es la evolucion del protagonista humano que de patiño termina haciendo un acto heroico suicida cuando deja de pensar en su bienestar. Por cierto para no ser actor y su primer trabajo como tal es bastante bueno.
Lo volveria a ver?.
Si.
Calificacion 9.
Primer film del director y del actor.

Pro: Lo sociologico. Que sea algo completamente distinto a lo que suelen presentar en C-F de extraterrestres.
Que tenga uno ganas de que ganen por una vez los ETs. Que los humanos se presenten con sus pros y contras.
Que l o que mate sea la humanidad.
Contra: El productor Jackson que trata de buscar hacer un hitazo nuevo despues de sus fracasos cinematrograficos y ser opera prima del director. Como una raza extraterrestre avanzada termina en guettos.
Que no hayan encontrado en 20 años como hacer un nuevo gatillo a las armas. =P

reseña de una pagina:
Vaya uno a saber si se filmará alguna vez El Eternauta. Pero no es temerario asegurar que Oesterheld, si viviera, celebraría Sector 9. Neill Blomkamp, su director, rodó una película sobre extraterrestres distinta. Distinta porque es una invasión extraterrestre al revés. Sus temas son la soledad, la discriminación, el egoísmo, la xenofobia, la explotación, la desconfianza y también, un poco, el amor. El gran hallazgo de Blomkamp es su escalofriante realismo, sobre todo el de la primera parte: haberse desviado de la previsibilidad que caracteriza al género y trasladar su historia a un entorno cotidiano, que es la segregación y los prejuicios interraciales.

INMIGRANTES ILEGALES. Los humanos, en nombre de una corporación privada, la MNU, abordan el gigantesco platillo averiado que flota sobre Johannesburgo. Y son humanos los que abducen a los forasteros, una raza alienígena bastante ajena al estereotipo al que nos tiene acostumbrados el cine de ciencia ficción. Humanoides, pero parientes cercanos de los langostinos, parecen poco inteligentes y la nueva situación los encuentra débiles, enfermizos y desorientados. Mientras la MNU piensa qué hacer con ellos, los visitantes son refugiados en el Sector 9, un derruido campamento que evoca sin vueltas al apartheid sudafricano. La MNU afirma velar por su bienestar, pero en realidad pretenden apropiarse de su tecnología con fines bélicos. El botín es poco accesible: su arsenal sólo funcionan en contacto con el ADN extraterrestre, lo cual les lleva a despedazar a los visitantes en laboratorios que recuerdan a los del doctor Menguele.
Entre el documental y el thriller, el film se centra en el vía crucis de Wikus van der Merwe, un entusiasta burócrata de la corporación devenido en mutante: durante una requisa se pescó un virus que alteró su ADN, transformándolo en un hombre en evolución a langosta. Por su espeluznante metamorfosis (el rumor oficial murmura que lo contrajo al acostarse con una alienígena), la MNU lo presenta como un peligroso terrorista que ha traicionado a la Tierra. Y lo persigue sin respiro.

“¡SAL DE AQUÍ, ALIENÍGENA DE MIERDA!” La dinámica del film crece en violencia cuando el director de la MNU le encarga a su yerno, el agente Wikus, hacerles firmar una orden de desalojo del Sector 9. Y el criminal trato humano que reciben los alienígenas se desata en toda su crudeza. Los buenos no son tan distintos de los malos: si bien Wikus comprende el dialecto eté de los langostinos y se diferencia del jefe militar por su perfil piadoso, también se pavonea frente a las omnipresentes cámaras por los “limpios procedimientos” que les permiten desintegrar a los huevos alienígenas (“hay que verlos, saltan como palomitas de maíz”). En la opresiva atmósfera que consigue Blomkamp se respira la xenofobia. Hasta la de los negros, cuyos bustos parlantes en los noticieros reclaman “mandarlos de vuelta” a su planeta. Wikus es la presa codiciada por la MNU, que se convierte en el eslabón perdido capaz de activar las armas extraterrestres. Las ambiciones de la multinacional compiten en el ghetto con una pandilla nigeriana que intercambia sexo y comida de gato –el plato preferido de los alienígenas- por tecnología. Despreciado por sus amigos y hasta por su esposa, el único lugar en el mundo donde Wikus encuentra refugio es en el Sector 9.
La idea para Sector 9 nació en Live in Joburg, un corto de Blomkamp más sucio y convincente, cargado con el mismo clima histérico de cámara portátil.

MAGIA HÍBRIDA. La película tiene otros ingredientes: un líder de la cofradía nigeriana que pretende absorber el poder de los crustáceos alienígenas, una alianza de conveniencia que acaba en una extraña amistad y la singular paradoja según la cual los únicos que defienden los derechos de los langostinos interplanetarios son los organismos de derechos humanos. Si bien Sector 9 rompe con la pulcritud estética y otras convenciones propias del género, hacia el final el director derrapa en un giro näif que no desentona con su experiencia como creador de videojuegos. Entonces, Sector 9 se parece más a Robocop o Transformers que a la película que estuvimos viendo.
Por contraparte, Blomkamp consigue dar una vuelta de rosca a un tema clásico de la ficción sobre extraterrestres de las últimas décadas: el hibridaje terrícola-alienígena. Si en films y series como V Invasión Extraterrestre, X Files, Taken, Alien y Battlestar Galáctica la fusión de ADN terrícola-extraterrestre pretende la salvación colectiva, en Sector 9 el mismo ADN busca la salvación del protagonista. O consumar la peor pesadilla posible: crear la más poderosa arma de destrucción del universo.

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2 Commentsto Distrito 9

  1. Dark Crow dice:

    [url=http://www.youtube.com/watch?v=P7YbUlIdBBI]http://www.youtube.com/watch?v=P7YbUlIdBBI[/url]
    Esta pelea esta buenisima.
    [url=http://www.youtube.com/watch?v=5k9_45YsQCw&feature=related]http://www.youtube.com/watch?v=5k9_45YsQCw…feature=related[/url]
    Brutal el testeo de armas.
    [url=http://www.youtube.com/watch?v=Lr0hrulyGAo&feature=related]http://www.youtube.com/watch?v=Lr0hrulyGAo…feature=related[/url]

  2. Vaelia dice:

    A mi me encantó también, una de las poquísimas pelis que he visto más de una vez.