Suciedad Contemporanea

now browsing by category

 

Iran

Fuente: [url=http://www.lostiempos.com/diario/actualidad/internacional/20090616/multitudinaria-manifestacion-deja-al-menos-un-muerto-en_16743_26733.html]http://www.lostiempos.com/diario/actualida…6743_26733.html[/url]

Cientos de miles de iraníes desafiaron ayer a las autoridades y colapsaron el centro de Teherán en apoyo del candidato opositor, Mir Husein Musaví, quien pidió la repetición de los comicios presidenciales del viernes, en los que venció el presidente Mahmud Ahmadineyad, con cerca del 64 por ciento de los votos, casi el doble de lo obtenido por su contrincante.

La manifestación concluyó con nuevos enfrentamientos entre grupos de milicianos \”Basij\” y seguidores de Musaví que causaron un muerto por arma de fuego, decenas de heridos y numerosos detenidos. Testigos indicaron que los milicianos abrieron fuego contra un grupo de seguidores de Musaví en la plaza de Azadí, en el oeste de Teherán, donde se dirigió casi un millón de manifestantes. En silencio, con el brazo derecho alzado y haciendo el signo de la victoria con los dedos, cientos de miles de personas desfilaron por la emblemática avenida Enguelab, escenario de las manifestaciones que hace 30 años acabaron con la autocracia del último Sha de Persia, Mohamad Reza Pahleví.

Al frente de la marcha dos hombres que hace tres décadas también lideraron el movimiento opositor al régimen, el ex primer ministro Mir Husein Musaví y el ex presidente del Parlamento Mehdi Karrubí. Sereno, con rostro cansado por los últimos días de tensión, Musaví reapareció en público pese a la advertencia del ministerio de Interior de que sería el responsable de lo que sucediera en una manifestación que había sido vetada.

\”Estamos preparados para participar en unas nuevas elecciones presidenciales. El voto del pueblo es mucho más importante que la persona de Musaví o cualquier otro\”, afirmó. Sus palabras apenas llegaron a unos miles de personas cercanas al altavoz que portaba en sus manos. Kilómetros más atrás, otros miles caminaban con decisión y con el simple interés de testimoniar lo que consideran casi como un \”golpe de estado\”.

La movilización supone un importante desafío al gobierno de Ahmadineyad y arroja dudas sobre la legitimidad de su sorprendente triunfo por mayoría en las urnas. El Presidente, con los medios de prensa y los aparatos del Estado a su favor, apenas logró reunir el domingo a varios miles de personas en la céntrica plaza de Valiy-e Asr, pese a que los convocó en un discurso a través de la televisión nacional.

Con los medios de prensa extranjeros retenidos en Teherán y la televisión estatal eludiendo las movilizaciones, poco se conoce de la situación en otras ciudades. Varios tiroteos esporádicos estallaron anoche en los barrios del norte de Teherán, donde también se oyeron algunas explosiones. Desde la oficina de la agencia Efe en Teherán se pudieron escuchar varias ráfagas de ametralladora poco después de que en la capital comenzaran, una noche más, los gritos de \”Alahu Akbar\” (Dios es el más grande) proferidos por los seguidores del candidato opositor.(…)

Tengo que terminar de ver Persépolis

RPDC amenaza con lanzar ataque preventivo contra EEUU

Fuente: [url=http://www.spanish.xinhuanet.com/spanish/2009-06/16/content_893709.htm]http://www.spanish.xinhuanet.com/spanish/2…tent_893709.htm[/url]

PYONGYANG, 15 jun (Xinhua) — La República Popular Democrática de Corea (RPDC) advirtió que lanzará un ataque preventivo contra Estados Unidos.

Pak Jae Gyong, viceministro de las Fuerzas Armadas Populares de la RPDC, hizo estas declaraciones en una congregación masiva que atrajó a 10.000 personas para denunciar la resolución recientemente aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU. “Bajo la situación actual en la que el Ejército Popular Coreano (KPA en inglés) está técnicamente en guerra con los imperialistas estadounidenses, y como el Acuerdo de Armisticio ha perdido su fuerza legal obligatoria, el KPA ejercerá rápidamente el derecho a un ataque preventivo para responder a la menor provocación de los enemigos”, indicó Pak.

Amenazó con asestar golpes a “partes vitales de EEUU” y “eliminar a todas las tropas agresoras imperialistas sin importar dónde se encuentren en el mundo”. Por otra parte, Kim Ki Nam, secretario del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, dijo en la congregación que la resolución de la ONU es “otra provocación grave”. La RPDC responderá a cualquier intento de bloquearla con “golpes decididos y mortales”, declaró.

El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el viernes de forma unánime sanciones más amplias contra la RPDC por su prueba nuclear del 25 de mayo. La resolución prohibe todas las exportaciones de armas desde la RPDC y la mayoría de las importaciones hacia el país. Autoriza a los países miembros de la ONU a inspeccionar los cargamentos aéreos, marítimos y terrestres de la RPDC y les pide que decomisen y destruyan cualquier artículo transportado en violación a las sanciones.

Unas palabras que la Iglesia no quiere recordar

Fuente: [url=http://www.elpais.com/articulo/opinion/palabras/Iglesia/quiere/recordar/elpepusoc/20090603elpepiopi_4/Tes]http://www.elpais.com/articulo/opinion/pal…elpepiopi_4/Tes[/url]

JUAN ARIAS 03/06/2009

Una buena parte de la Iglesia católica, concretamente del clero, deja espantados y verdaderamente escandalizados a los fieles que aún creen en dicha confesión religiosa, debido al número cada día mayor de abusos a niños y adolescentes por parte del clero.
Nunca la palabra escándalo ha sido mejor usada. Y lo curioso es que esa palabra fue la usada hace más de 2.000 años por quien, según la Iglesia, fue su fundador y maestro, Jesús, el profeta de Nazareth. Y lo hizo para referirse a los abusos con los niños.

Los exégetas saben muy bien que es muy difícil decidir cuáles de las sentencias importantes que se ponen en boca de Jesús son de su autoría o fueron creadas o manipuladas por los evangelistas.

Suelen existir dos criterios para reconocer cuándo unas palabras pueden ser o no literales, pronunciadas tal cual por Jesús. El primero es que aparezca en más de uno de los Evangelios considerados inspirados por la Iglesia. Si aparece en más de dos, la credibilidad aumenta. Un segundo criterio es que se trate de una frase tan plástica y original, a veces tan compleja o grave, que difícilmente haya podido ser obra de la invención de un evangelista.

Pues bien, existe un texto enormemente fuerte y eficaz de los Evangelios que habla precisamente del escándalo de abusar de los niños. Jesús es tajante. Pide la pena de muerte para quien escandalice a un niño. ¿Y qué mayor escándalo para un niño que abusar de él sexualmente?

El texto aparece nada menos que en los tres Evangelios llamados sinópticos: Mateo 18,5; Marcos, 9,42 y Lucas, 9,46. La Biblia de Jerusalén, traducida directamente del original, le pone como título al episodio en los tres Evangelios la palabra “escándalo”.

En el Evangelio de Mateo, tras una discusión de los apóstoles sobre problemas de jerarquía, en la que le preguntan al maestro quién será el “mayor” en el Reino de los Cielos, Jesús desarma sus ambiciones, llama a un niño y les dice que si no cambian de mentalidad y no se hacen como los niños, “no entrarán en el nuevo Reino”. Enseguida, Jesús se identifica él mismo con los niños: “Quién recibe a un niño como ése en mi nombre, a mí me recibe”. Y enseguida pronuncia la gran sentencia: “Pero al que escandalice a uno de estos pequeños, más le vale que le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos y le hundan en lo profundo del mar” (Mt, 18,6 ss). Jesús continúa diciendo que en el mundo siempre habrá escándalos, pero ¡ay de aquel hombre por quien el escándalo viene!

La imagen gráfica de la rueda de molino alrededor del cuello de quien escandalice a un niño, aparece exactamente igual en el Evangelio de Marcos y en el de Lucas, además de en el de Mateo. Lo que revela que debía de haber creado gran impacto entre los primeros cristianos y que no fue posible silenciarla.

La imagen que sugiere Jesús haría pensar que a quien escandaliza a un niño más le valdría suicidarse. Pero, los tres evangelistas hablan de pena de muerte. Son los otros quienes deben colgarle esa piedra de molino al cuello y arrojarle al mar. ¿Cabe pena más severa?

Ahora bien, ante todo lo que está ocurriendo en la Iglesia, donde se multiplican las noticias sobre escándalos y abusos cometidos contra niños por una parte del clero, tanto bajo como alto, me pregunto por qué el papa Benedicto XVI, los obispos, cardenales y prefectos de las congregaciones romanas, en vez de levantar discusiones bizantinas sobre si es peor la pederastia o el aborto, o intentar silenciar los escándalos, no han obligado a todos los párrocos del mundo a leer en las iglesias y en los seminarios y en las curias episcopales la terrible condena del manso profeta de Nazareth contra quien abusa de un niño y lo escandaliza.

Deberían repartir pancartas con esa frase lapidaria de los Evangelios. Que se trate de suicidio o de pena de muerte no importa. Lo que Jesús quiere decir es que ese individuo no merece seguir viviendo. ¿Les parece esto muy fuerte? ¿Pero no dicen que los Evangelios han sido inspirados por Dios?

Todo el resto es querer recoger agua en un tamiz, es tergiversar, engañar a los fieles sin tener el coraje de enfrentar a los culpables con las palabras de acero de Jesús. Para él el símbolo del niño y de la infancia es una metáfora de transformación, de nueva vida.

Al intelectual fariseo Nicodemo, Jesús le dice que tiene que volver a entrar en el vientre de su madre y renacer como niño para entrar en otra dimensión vital superior.

Todo atropello a un niño es un atropello a la vida misma, de ahí que quien lo comete no merezca, según Jesús, seguir viviendo.

Y, añade, si tu mano o tus pies o tus ojos se convierten en objeto de escándalo, y más si se escandaliza a un niño, es mejor automutilarse. Jesús pronuncia esas palabras inmediatamente después de la imagen de la rueda de molino.

Más de una vez me han preguntado si cuando yo estudiaba en un colegio de religiosos existían abusos con los adolescentes. No lo sé. Lo que recuerdo es que después de haber tomado una ducha con agua helada en pleno invierno en la gélida ciudad de Logroño, uno de los padres profesores obligaba a pasar uno por uno por su cuarto a los alumnos recién duchados para darles, desnudos, friegas de alcohol que según él “revigorizaban el cuerpo”. Por la noche, antes de dormir, en la capilla, nos decían que la Virgen lloraba por nuestros “pecados solitarios”. Los de ellos no eran pecados, eran simples masajes terapéuticos de alcohol.

La Iglesia sigue queriendo minimizar los abusos de menores que ha consumado su clero. De nada va a servir.

Lo quieran o no, la rueda de molino de la que hablan los evangelistas, colocada sobre el cuello de cada cura pederasta, seguirá siendo la condena inapelable de los ciudadanos y de la sociedad al gran escándalo de abusar de un menor del que ellos deberían ser los mejores guardianes y defensores.

Adiós, clase media, adiós

Algo largo, pero creo que vale la pena. La mayoria de datos se refieren a España pero hay bastantes referencias internacionales. Describe la desaparición de la llamada “clase media” y el surgimiento de una “clase-masa”, que pierde los derechos laborales y sociales conquistados en los últimos siglos y, sin embargo, incapaz de rebelarse como lo hicieran sus predecesores.

[url=http://www.elpais.com/articulo/semana/Adios/clase/media/adios/elpepueconeg/20090531elpneglse_2/Tes]http://www.elpais.com/articulo/semana/Adio…elpneglse_2/Tes[/url]

La recesión golpea con dureza al principal sustento del Estado de bienestar
RAMÓN MUÑOZ 31/05/2009

Ridiculizada por poetas y libertinos; idolatrada por moralistas; destinataria de los discursos de políticos, papas, popes y cuantos se suben alguna vez a un púlpito en busca de votantes o de adeptos; adulada por anunciantes; recelosa de heterodoxias y huidiza de revoluciones; pilar de familias y comunidades; principal sustento de las Haciendas públicas y garante del Estado de bienestar. La clase media es el verdadero rostro de la sociedad occidental. En un mundo globalizado, en el que hasta en el más mísero país siempre se puede encontrar a alguien con suficientes medios para darse un paseo espacial, sólo la preeminencia de la clase media distingue los Estados llamados desarrollados del resto. Los países dejan de ser pobres no por el puesto que ocupan sus millonarios en el ranking de los más ricos -de ser así, México o la India estarían a la cabeza del mundo dada la fortuna de sus potentados-, sino por la extensión de su clase media.

Pero parece que la clase media está en peligro o, al menos, en franca decadencia. Eso piensan muchos sociólogos, economistas, periodistas y, lo que es más grave, cada vez más estadísticos. Como los dinosaurios, esta “clase social de tenderos” -como la calificaban despectivamente los aristócratas de principios de siglo XX- aún domina la sociedad, pero la actual recesión puede ser el meteorito que la borre de la faz de la Tierra. Siguiendo con la metáfora, el proceso no será instantáneo sino prolongado en el tiempo, pero inevitable. La nueva clase dominante que la sustituya bien pudieran ser los pujantes mileuristas, los que ganan mil euros al mes. Tal y como sucedió cuando los mamíferos sustituyeron a sus gigantes antecesores, los mileuristas tienen una mayor capacidad de adaptación a circunstancias difíciles. También se adaptan los pobres, pero no dejan de ser excluidos, mientras que los mileuristas son integradores de la masa social. Por eso se están extendiendo por todas las sociedades desarrolladas.

El mileurismo -un término inventando por la estudiante Carolina Alguacil, que escribió una carta al director de EL PAÍS en agosto de 2005 para quejarse de su situación laboral- ha dejado de ser un terreno exclusivo para jóvenes universitarios recién licenciados que tienen que aceptar bajos salarios para hacerse con un currículo laboral. En los últimos años ha incorporado a obreros cualificados, parados de larga duración, inmigrantes, empleados, cuarentones expulsados del mercado laboral y hasta prejubilados. Se estima que en España pueden alcanzar en torno a los doce millones de personas.

Su popularidad es tan creciente que ya hay varios libros dedicados exclusivamente a los mileuristas, tienen web propia y hasta película. Se llama Generazione 1.000 euro, una producción italiana que se acaba de estrenar. Cuenta la historia de un joven licenciado en matemáticas que malvive en una empresa de mercadotecnia y se enamora de otra mileurista. Basa su argumento en el libro con el mismo título que triunfó gracias a las descargas gratuitas de Internet (la gratuidad de la Red es una de las pocas válvulas de escape de los mileuristas).

Hasta los políticos comienzan a mirar hacia ellos. Las medidas anunciadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el debate del estado de la nación, aunque luego descafeinadas, parecen ser las primeras especialmente diseñadas para mileuristas: equiparar las ayudas al alquiler, eliminar para las rentas medias la desgravación de la vivienda (¡el pisito, icono de la clase media española!), bonos de transportes desgravables y, sobre todo, máster gratis sin límite para graduados en paro. Másteres, estudios de posgrado, doctorados, idiomas…, el signo de identidad de esta generación Peter Pan, dicen que la mejor preparada de la historia pero cuya edad media de emancipación del hogar familiar está a punto de alcanzar los 30 años.

La estadística da cuenta cada vez de forma más fehaciente de la pujanza del mileurismo frente a la bendita clase media. Uno de los datos más reveladores se encuentra en la Encuesta de Estructura Salarial del Instituto Nacional de Estadística (INE), un informe cuatrienal pero que desnuda la realidad sociolaboral como ninguna otra. Según la misma, el sueldo medio en España en 2006 (última vez que se realizó) era de 19.680 euros al año. Cuatro años antes, en 2002, era de 19.802 euros. Es decir, que en el periodo de mayor bonanza de la economía española, los sueldos no sólo no crecieron, sino que cayeron, más aún si se tiene en cuenta la inflación.

Si nos remontamos a 1995, la primera vez que se llevó a cabo la encuesta, la comparación es aún más desoladora. El salario medio en 1995 era de 16.762 euros, por lo que para adecuarse a la subida de precios experimentada en la última década, ahora tendría que situarse en torno a los 24.000 euros. Se trata del sueldo medio, que incluye el de los que más ganan. Por eso convendría tener en cuenta otro dato más esclarecedor: la mitad de los españoles gana menos de 15.760 euros al año, es decir, son mileuristas.

Los sueldos se han desplomado pese a la prosperidad económica e independientemente del signo político del partido en el poder en los últimos años (desde 1995 han gobernado sucesivamente PSOE, PP y nuevamente PSOE). La riqueza creada en todos esos años ha ido a incrementar principalmente las llamadas rentas del capital.

Algunos dan definitivamente por muerta la clase media. Es el caso del periodista Massimo Gaggi y del economista Eduardo Narduzzi, que en su libro El fin de la clase media y el nacimiento de la sociedad de bajo coste (Lengua de Trapo) vaticinaban la aparición de un nuevo sistema social polarizado, con una clase tecnócrata reducida y crecientemente más rica en un extremo, y en el otro un “magma social” desclasado en que se confunden las antiguas clases media y baja, definidas por una capacidad de consumo muy limitado, a imagen y semejanza de los productos y servicios que les ofrecen las compañías low cost (bajo coste) como Ikea, Ryanair, Mc Donald’s, Zara o Skype.

“Nosotros hablábamos de la aparición de una clase de la masa, es decir, de una dimensión social sin clasificación que de hecho contiene todas las categorías, con excepción de los pobres, que están excluidos, y de los nuevos aristócratas. La clase media era la accionista de financiación del Estado de bienestar, y su desaparición implica la crisis del welfare state, porque la clase de la masa ya no tiene interés en permitir impuestos elevados como contrapartida política que hay que conceder a la clase obrera, que también se ha visto en buena parte absorbida por la clase de la masa. La sociedad que surge es menos estable y, como denunciábamos, potencialmente más atraída por las alarmas políticas reaccionarias capaces de intercambiar mayor bienestar por menos democracia. También es una sociedad sin una clara identidad de valores compartidos, por lo tanto, es oportunista, consumista y sin proyectos a largo plazo”, señalan los autores a EL PAÍS.

El declive de la clase media se extiende por todo el mundo desarrollado. En Alemania, por ejemplo, un informe de McKinsey publicado en mayo del año pasado, cuando lo peor de la crisis estaba aún por llegar, revelaba que la clase media -definida por todos aquellos que ganan entre el 70% y el 150% de la media de ingresos del país- había pasado de representar el 62% de la población en 2000 al 54%, y estimaba que para 2020 estaría muy por debajo del 50%.

En Francia, donde los mileuristas se denominan babylosers (bebés perdedores), el paro entre los licenciados universitarios ha pasado del 6% en 1973 al 30% actual. Y les separa un abismo salarial respecto a la generación de Mayo del 68, la que hizo la revolución: los jóvenes trabajadores que tiraban adoquines y contaban entonces con 30 años o menos sólo ganaban un 14% menos que sus compañeros de 50 años; ahora, la diferencia es del 40%. En Grecia, los mileuristas están aún peor, ya que su poder adquisitivo sólo alcanza para que les llamen “la generación de los 700 euros”.

En Estados Unidos, el fenómeno se asocia metafóricamente a Wal-Mart, la mayor cadena de distribución comercial del mundo, que da empleo a 1,3 millones de personas, aplicando una política de bajos precios a costa de salarios ínfimos -la hora se paga un 65% por debajo de la media del país-, sin apenas beneficios sociales y con importaciones masivas de productos extranjeros baratos procedentes de mercados emergentes, que están hundiendo la industria nacional. La walmartización de Estados Unidos ha sido denunciada en la anterior campaña presidencial tanto por los demócratas como por los republicanos. El presidente Barak Obama creó por decreto la Middle Class Task Force, el grupo de trabajo de la clase media, que integra a varias agencias federales con el objeto de aliviar la situación de un grupo social al que dicen pertenecer el 78% de los estadounidenses. El grupo tiene su propia página web y su lema: “Una clase media fuerte es una América fuerte”.

Hacen falta más que lemas para salir de la espiral que ha creado la recesión y que arrastra en su vórtice a una clase media debilitada hacia el mileurismo o tal vez más abajo. En Nueva York, 1,3 millones de personas se apuntaron a la sopa boba de los comedores sociales en 2007. Apenas un año después, tres millones de neoyorquinos eran oficialmente pobres. Los pobres limpios, como se denomina a los que han descendido desde la clase media, también comienzan a saturar los servicios sociales en España. Las peticiones de ayuda en Cáritas han aumentado un 40%, y el perfil social del demandante empieza a cambiar: padre de familia, varón, en paro, 40 años, con hipoteca, que vive al día y que ha agotado las prestaciones familiares.

Con el propósito de tranquilizar a la población, los dirigentes han comenzado a hablar de “brotes verdes” para designar los primeros signos de recuperación. Pero ésta no es una crisis cualquiera. Howard Davidowitz, economista y presidente de una exitosa consultora, se ha convertido en una estrella mediática en Estados Unidos al fustigar sin piedad el optimismo de la Administración de Obama. “Estamos hechos un lío y el consumidor es lo suficientemente listo para saberlo. Con este panorama económico, el consumidor que no se haya petrificado es que es un maldito idiota. Esta crisis hará retroceder al país al menos diez años y la calidad de la vida nunca volverá a ser la misma”.

La marcada frontera que separaba la clase media de la exclusión y de los pobres se está derrumbando a golpes de pica como lo hizo el muro de Berlín, y algunos se preguntan si tal vez la caída del telón de acero no haya marcado el inicio del fin de conquistas sociales y laborales que costaron siglos (y tanta sangre), una vez que el capitalismo se encontró de repente sin enemigo.

Al margen de especulaciones históricas, lo cierto es que la desigualdad crece. En España, la Encuesta de Condiciones de Vida, realizada en 2007 por el INE, señalaba que casi 20 de cada 100 personas estaban por debajo del umbral de la pobreza. El último informe FOESSA sobre exclusión y desarrollo social en España, de Cáritas, resaltaba que hay un 12,2% de hogares “pobres integrados”, esto es, sectores integrados socialmente pero con ingresos insuficientes y con alto riesgo de engrosar las listas de la exclusión. Su futuro es más incierto que nunca, y muchos hablan de un lento proceso de desintegración del actual Estado de bienestar.

Otros expertos son mucho más optimistas y descartan que se pueda hablar del fin de clase media. “Es una afirmación excesivamente simplista que obvia algunos de los grandes avances que ha registrado la sociedad española en el largo plazo. Las crisis comienzan perjudicando a los hogares con menores ingresos y menor nivel formativo, para extender posteriormente sus efectos al resto de grupos. Y aunque mantenemos niveles de desigualdad considerablemente elevados en el contexto europeo estamos todavía lejos de ser una sociedad dual”, señala Luis Ayala, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Rey Juan Carlos y uno de los autores del informe FOESSA.

El catedrático de Estructura Económica Santiago Niño Becerra ha saltado a la fama editorial por su libro El crash de 2010 (Los Libros del Lince), en el que afirma que la crisis no ha hecho más que empezar y que será larga y dura. A la pregunta de cómo va a afectar esta debacle a la clase media, contesta: “El modelo de protección social que hemos conocido tiende a menos-menos porque ya ha dejado de ser necesario, al igual que lo ha dejado de ser la clase media: ambos han cumplido su función. La clase media actual fue inventada tras la II Guerra Mundial en un entorno posbélico, con la memoria aún muy fresca de la miseria vivida durante la Gran Depresión y con una Europa deshecha y con 50 millones de desplazados, y lo más importante: con un modelo prometiendo el paraíso desde la otra orilla del Elba. La respuesta del capitalismo fue muy inteligente (en realidad fue la única posible, como suele suceder): el Estado se metió en la economía, se propició el pleno empleo de los factores productivos, la población se puso a consumir, a ahorrar y, ¡tachín!, apareció la clase media, que empezó a votar lo correcto: una socialdemocracia light y una democracia cristiana conveniente; para acabar de completar la jugada, esa gente tenía que sentirse segura, de modo que no desease más de lo que se le diese pero de forma que eso fuese mucho en comparación con lo que había tenido: sanidad, pensiones, enseñanza, gasto social… que financiaban con sus impuestos y con la pequeña parte que pagaban los ricos (para ellos se inventaron los paraísos fiscales). Todo eso ya no es necesario: ni nadie promete nada desde la otra orilla del Elba, ni hay que convencer a nadie de nada, ni hay que proteger a la población de nada: hay lo que hay y habrá lo que habrá, y punto. Por eso tampoco son ya necesarios los paraísos fiscales: ¿qué impuestos directos van a tener que dejar de pagar los ricos si muchos de ellos van a desaparecer y si la mayoría de los impuestos de los que quieren escapar van a ser sustituidos por gravámenes indirectos?”.

Y es que frente a la extendida idea de que la mejor forma de favorecer el bienestar es conseguir altas tasas de crecimiento y de creación de empleo, en los momentos de máxima creación de empleo la desigualdad no disminuyó. Al contrario, desde el primer tercio de los años noventa la pobreza no ha decrecido. Los salarios crecen menos que el PIB per cápita. El último informe mundial de salarios de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) destaca que entre 2001 y 2007 crecieron menos del 1,9% en la mitad de los países. En España, el aumento real fue casi cero, como en Japón y Estados Unidos. Para 2009, la OIT pronostica que los salarios crecerán sólo un 0,5%.

En España hay un dato aún más revelador del vértigo que siente la clase media cuando se asoma al abismo de inseguridad que le ofrece esta nueva etapa del capitalismo. El número de familias que tiene a todos sus miembros en paro ha sobrepasado el millón. Y peor aún, la tasa de paro de la persona de referencia del hogar -la que aporta más fondos y tiene el trabajo más estable- está ya en el 14,5%, muy similar a la del cónyuge o pareja (14,4%), cuyo sueldo se toma como un ingreso extra, mientras que la de los hijos se ha disparado cinco puntos en el primer trimestre y está en el 26,8%.

Luis Ayala constata que, por primera vez desde mediados de los años noventa, al inicio de esta crisis hemos asistido a tres cambios claramente diferenciales respecto al modelo distributivo en vigor en las tres décadas anteriores: la desigualdad y la pobreza dejaron de reducirse (aunque no aumentaron) por primera vez desde los años sesenta; por primera vez en muchos años la desigualdad no disminuyó en un contexto de crecimiento económico, y a diferencia de lo que sucedió con la mayoría de los indicadores macroeconómicos (PIB per cápita, déficit público, desempleo, etcétera), durante este periodo se amplió el diferencial con la UE desde el punto de vista de desigualad.

“Si en un tiempo de mareas altas no disminuyó la desigualdad, cabe contemplar con certeza su posible aumento en un periodo de mareas bajas. La evidencia que muestran varios estudios de cierta conexión entre determinadas manifestaciones del desempleo y la desigualdad y la pobreza obligan, inevitablemente, a pensar en un rápido aumento de la desigualdad y de las necesidades sociales. Así, tanto el número de hogares en los que todos los activos están en paro como la tasa de paro de la persona principal del hogar son variables más relacionadas con la desigualdad que los cambios en las cifras agregadas de empleo. La información más reciente que ofrece la EPA deja pocas dudas: en ninguno de los episodios recesivos anteriores crecieron tan rápido ambos indicadores, por lo que cabe pensar en aumentos de la desigualdad y de la pobreza monetaria muy superiores a los de cualquier otro momento del periodo democrático”, afirma Ayala.

En efecto, estos datos demolen en parte el viejo bastión español frente a la crisis: el colchón familiar. ¿Cómo van a ayudar los padres a los hijos si comienzan a ser los grandes protagonistas del drama del desempleo? El profesor Josep Pijoan-Mas, del Centro de Estudios Monetarios y Financieros (CEMFI), en el artículo Recesión y crisis (EL PAÍS, 15 de marzo), observaba una preocupante similitud entre esta recesión y la de 1991-1994, cuando el paro trepó hasta el 24%. “Los datos muestran que el aumento de la desigualdad en el ámbito individual se amplifica cuando agrupamos los datos por hogares. Esto sugiere que, contrariamente a la creencia popular, la familia no es un buen mecanismo de seguro en España: cuando un miembro del hogar experimenta descensos de renta, lo mismo sucede al resto de miembros del hogar”, indica.

Afirmar a simple vista que, por primera vez desde la II Guerra Mundial (la Guerra Civil en España), las nuevas generaciones vivirán peor que la de sus padres puede parecer osado. Nunca tantos jóvenes estudiaron en el extranjero (gracias a las becas Erasmus), viajaron tanto (gracias a las aerolíneas low cost) o prolongaron tanto su formación. Pero se trata de una sensación de riqueza ilusoria, apegada al parasitismo familiar. El número de jóvenes españoles que dispone de una independencia económica plena disminuyó desde el 24% en 2004 al 21% en 2008, según el último informe del Instituto de la Juventud (Injuve). El proceso es general en toda Europa. El número de “viejos estudiantes” ha crecido a un ritmo vertiginoso en los últimos años. Así, el 15% del total de estudiantes de la Unión Europea (entendiendo por tales los que dedican todo su tiempo a la formación) tiene ya más de 30 años, según el Informe de la Juventud de la Comisión Europea de abril pasado.

Cuando esos maduros estudiantes se incorporan al mercado laboral les esperan contratos temporales, tal vez para siempre. Y es que según el informe de la UE, el porcentaje de personas que tenía un contrato temporal y no podía encontrar uno fijo se incrementa con la edad. Del 37%, entre los 15 a los 24 años, hasta el 65%, entre los 25 los 29. Atrapados en la temporalidad de por vida, van desengañándose de encontrar algo mejor a medida que envejecen. Muchos cuando rondan la treintena ya están resignados a su suerte.

“Desde luego es la generación que menos periodos de adultez va a tener. Pueden entrar en el mercado laboral a los 33 años y encontrarse con un ERE a los 50 o directamente con la prejubilación. El problema es que ofertamos puestos de trabajo que puede hacer cualquiera. Por eso, curiosamente, los jóvenes van a responder a la crisis dependiendo de las posibilidades que tengan de esperar y formarse adecuadamente. Y en eso es decisivo el poder adquisitivo de los padres y su nivel educativo”, señala el sociólogo Andreu López, uno de los autores del último informe de Injuve.

El drama laboral no sólo lo sufren los jóvenes. Puede que los miles de trabajadores que están perdiendo su empleo vuelvan al mercado laboral cuando la crisis escampe, pero no con las mismas condiciones. Por ejemplo, la ingente masa laboral de la construcción que ha sostenido la economía española deberá ocuparse en otros sectores. “Todo lo que aprendieron a hacer trabajando en los últimos años les valdrá de poco o nada. Por tanto, no es de esperar que sus salarios sean muy altos cuando encuentren nuevos empleos. De hecho, la evidencia empírica disponible para Estados Unidos muestra que los desempleados ganan menos cuando salen de un periodo de desempleo y que dicha pérdida salarial es mayor cuanto más largo ha sido el periodo de desempleo”, indicaba el profesor Pijoan-Mas.

Los gobernantes han encontrado un bálsamo de Fierabrás contra el paro y la precariedad laboral: innovación y ecología. Los empleos que nos sacarán de la crisis estarán basados en el I+D+i. Es lo que Zapatero ha llamado el nuevo modelo productivo. Sin contar con que los sectores tecnológicos no son muy intensivos en mano de obra, la premisa parte en cierta forma de una falacia: la de pensar que los países emergentes se quedaran parados mientras convertimos los cortijos andaluces en factorías de chips ultraconductores y laboratorios genéticos.

La globalización también ha llegado al I+D+i. La India, por ejemplo, produce 350.000 ingenieros al año (los mejores en software de todo el mundo), anglófonos y con un salario medio de 15.000 dólares al año, frente a los 90.000 que ganan en Estados Unidos. Por su parte, China está a punto de convertirse en el segundo inversor mundial en I+D. “Cuando despertemos de la crisis en Europa, descubriremos que en la India y en China producen muchas más cosas que antes”, avisa Michele Boldrin, catedrático de la Washington University.

Ante este clima de inseguridad y falta de perspectivas, no es de extrañar que el 45,8% de los parados esté considerando opositar y el 14,6% ya esté preparando los exámenes, según una encuesta de Adecco. Ser funcionario se ha convertido en el sueño laboral de cualquier español, y puede ser el último reducto de la clase media. El único peligro es que su factura es crecientemente alta para un país en el que se desploman los ingresos por cotizaciones sociales y por impuestos ligados a la actividad y a la renta. La última EPA refleja que los asalariados públicos han crecido en un año en 116.200 personas, sobrepasando por primera vez la cifra de tres millones.

El coste total de sus salarios alcanzará este año los 103.285 millones de euros, según datos del Ministerio de Política Territorial. Cada funcionario le cuesta a cada habitante 2.400 euros, el doble si consideramos sólo a los asalariados. ¿Puede permitirse una economía tan maltrecha una nómina pública que consume el equivalente al 10% de la riqueza nacional en un año?

Un panorama tan sombrío para amplias capas de la población puede sugerir que pronto se vivirán enormes convulsiones sociales. Algunos advierten de un resurgimiento de movimientos radicales, como el neofascismo. Por el momento, nada de eso se ha producido. Las huelgas generales convocadas por los sindicatos tradicionales en países como Francia o Italia no han tenido consecuencia alguna, porque los más damnificados -parados y mileuristas- no se sienten representados por ellos.

En España, ni siquiera se han convocado paros. Y los llamados sindicatos de clase van de la mano del Gobierno al Primero de Mayo e invitan al líder de la oposición a sus congresos. Un marco demasiado amigable con el poder político teniendo detrás cuatro millones de parados y casi un tercio de los asalariados con contrato temporal.

Puede que no sea muy romántico advertir de que, tampoco esta vez, seremos testigos de una revolución, pero es muy probable que la caída del bienestar se acepte con resignación, sin grandes algaradas, ante la indiferencia del poder político, que llevará sus pasos hacia la política-espectáculo, muy en la línea de algunas apariciones de Silvio Berlusconi o Nicolas Sarkozy, cuya vida social tiene más protagonismo en los medios de comunicación que las medidas que adoptan como responsables de Gobierno.

En esa línea, Santiago Niño Becerra considera que hoy por hoy “la ideología prácticamente ha muerto”, y gradualmente, evolucionaremos hacia un sistema político en el que un grupo de técnicos tomará las decisiones y “la gente, la población, cada vez tendrá menos protagonismo.

“Conceptos como funcionarios, jubilados, desempleados, subempleados, mileuristas, undermileuristas irán perdiendo significado. Con bastante aceleración se irá formando un grupo de personas necesarias que contribuirán a la generación de un PIB cuyo volumen total decrecerá en relación al momento actual, personas con una muy alta productividad y una elevada remuneración (razón por la cual su PIB per cápita será mucho más elevado que el actual), y el resto, un resto bastante homogéneo, con empleos temporales cuando sean necesarios, dotados de un subsidio de subsistencia (el nombre poco importa) que cubra sus necesidades mínimas a fin de complementar sus ingresos laborales. La recuperación vendrá por el lado de la productividad, de la eficiencia, de la tecnología necesaria; pero en ese trinomio muy poco factor trabajo es preciso. Pienso que la sociedad post crash será una sociedad de insiders y outsiders: de quienes son necesarios para generar PIB y de quienes son complementarios o innecesarios”.

Una impresión bastante similar a la de los italianos Gaggi y Narduzzi que, en su último libro, El pleno desempleo (Lengua de Trapo, 2009), dibujan un marco sociolaboral sin beneficios contractuales, baby boomers (la generación que ahora tiene entre 40 y 60 años) resistiéndose a jubilarse, contratos temporales de servicios y autónomos sin seguridad. Y pese a todo, una masa social amorfa y resignada.

“La masa del siglo XXI es una forma social figurada no material en el sentido de que no es fácil ver las concretas manifestaciones políticas o sociales en la calle, mientras que es normal identificar conductas o comportamientos masificados como la utilización de Google o la pasión por el iPhone. Esto significa que cuatro millones de desempleados son hoy menos peligrosos de lo que lo eran en 1929, porque no hay una ideología política que contextualmente cohesione y aglutine el malestar y la disensión. Y también los sindicatos se han debilitado. La crisis actual rechaza amablemente lo que decíamos en nuestro ensayo del año pasado: el mercado de trabajo se desestructura y se flexibiliza hasta el punto de que aparecen como desocupados de hecho la mayoría de los trabajadores. Es el triunfo del factor de la producción capital, que aparentemente está en crisis, pero que en realidad se aprovecha de la crisis para dar el empujón final a las últimas, y pocas, certezas de los trabajadores”, señalan.

Hace cuatro años, Carolina Alguacil hizo una definición precisa y certera cuando acuñó el término de mileurista. “Es aquel joven licenciado, con idiomas, posgrados, másteres y cursillos (…) que no gana más de mil euros. Gasta más de un tercio de su sueldo en alquiler, porque le gusta la ciudad. No ahorra, no tiene casa, no tiene coche, no tiene hijos, vive al día… A veces es divertido, pero ya cansa”. Si hubiera que reescribir ahora esa definición sólo habría que añadir: “El mileurista ha dejado de tener edad. Gana mil euros, no ahorra, vive al día de trabajos esporádicos o de subsidios y, pese a todo, no se rebela”.

Objetivo: la ‘generación tapón’

Internacionalmente se les conoce como baby boomers. En España, le llaman generación tapón y abarca a los nacidos en las décadas de los cincuenta y sesenta, coincidiendo con un boom de la natalidad. Acaparan casi todos los puestos de responsabilidad en la política, los negocios e, incluso, la vida cultural, taponando el acceso a las nuevas generaciones, se supone que mejor formadas.

En el plano laboral, ocupan los trabajos fijos, mejor pagados, protegidos por derechos laborales y sindicatos poderosos, mientras los mileuristas sufren la precariedad y la temporalidad. Los trabajadores con un contrato temporal tuvieron un salario medio anual inferior en un 32,6% al de los indefinidos (Encuesta Estructura Salarial 2006).

Pero no todos los cuarentones son triunfadores o acomodados padres de familia. También ellos sufren su propia dualidad. Los salarios entre ejecutivos y empleados se han agrandado en los últimos años. El salario anual de los directores de empresas de más de diez trabajadores fue superior en un 206,6% al salario medio en 2006.

En tiempos de recesión, los ojos se vuelven hacia ellos. Además de ser el objetivo de los ERE, bajadas de salarios o el recorte de prestaciones, los baby boomers serán los principales paganos con sus impuestos del creciente endeudamiento que están acometiendo los Estados para sortear la crisis. Y eso sin contar la amenaza de la inviabilidad de sus pensiones cuando lleguen a la edad de jubilación, de la que no paran de advertir los malos augures como el FMI. Pero además de una carga laboral son también el principal sostén del consumo. Así que cuidado con quitar el tapón, no vaya a ser que se vaya el gas.

Carta a la presidenta de Chile

Me llego a mi correo.

Sra.
Michelle Bachelet
Presidenta de la República de Chile
Presente
Estimada Señora:

Junto con saludarla, me dirijo a usted con mucho respeto, pero también con urgencia. Soy Elena Varela, Documentalista y Licenciada en Música, actualmente presa política, con medidas cautelares de reclusión domiciliaria nocturna y con arraigo nacional. Fui detenida el 07 mayo del año 2008 en circunstancias en que realizaba una película financiada por el Fondo de la Cultura y las Artes, el documental: “NEWEN MAPUCHE”, que relataba los procesos de lucha social de las comunidades de Arauco Malleco. Mi trabajo de investigación partió el año 2004, cuando después de una beca de estudio en Alemania me enteré de la realidad que vivían dichas comunidades. Ese año decidí investigar en campo lo que ocurre y tomé mi cámara para registrar las realidades por las que atraviesan las comunidades en resistencia del Pueblo Mapuche que vive en el corazón de nuestro territorio. A la fecha llevaba filmados cinco años de trabajo. Con parte de ese material de archivo histórico se construiría la historia de un conflicto y se daría a conocer las razones de dirigentes y comunidades mapuche para realizar su lucha. Así también, como todos los documentales, se darían a conocer las políticas del gobierno, instrumentos legales ocupados en los años de democracia, me refiero a la ley antiterrorista, las razones de su uso y sus repercusiones en la sociedad en general, la prisión política racial. Desde esos años los sistemas de seguridad comienzan a investigar mis pasos así como los de muchos mapuches o gente que de una y otra forma ha interactuado para apoyar esta lucha. De manera que desde el punto de vista profesional he sido testigo de los procesos injustos de muchos mapuche en el sur, Desde la perspectiva humana me duele el alma- “ ver para creer”-. Ahora soy una de ellos, acusada como delincuente de haber asaltado dos bancos para entregar el dinero recaudado al MIR. Como usted sabe el MIR ya no existe como organización, así como tampoco Miguel Enríquez. No soy analfabeta de la historia, menos delincuente.

Por otro lado realizaba un documental sobre el Complejo Maderero Panguipulli, también rescatando la historia social y política de la zona, incluidos sus actores como el comandante Pepe (José Gregorio Liendo), así como la persecución, desaparición y ejecución de muerte de muchos luchadores de esa época. También La “operación retorno”, su aniquilamiento y sus proyecciones hasta estos días. Ese proyecto ganó el Fondo de Fomento para la Industria de cine el año 2006, de donde se ha escrito una investigación y guión de esta historia. Ambos proyectos han sido años de trabajo y esfuerzo.

Las personas no identificadas que allanaron mi casa –productora, se llevaron todo este trabajo en cintas y discos duros, maletas de artes con material de utilería para las filmaciones, latas de películas, etc. Hasta ahora no me han devuelto todo el material filmado.

A partir de la maleta de artes, en donde se encontraban lienzos del MCR (movimiento campesino revolucionario), banderas de MIR (Movimiento de izquierda Revolucionaria)y vestimentas militares que fueron ocupada en escenas de la película antes mencionada: “LOS SUEÑOS DEL COMANDANTE”, levantaron una historia en la cual: “yo, habría ocupado estas vestimentas para el uso de la formación e instrucción militar y que desde allí planificaría los asaltos y a la vez seria chofer operativo y pertenecería a una célula mirista. Ese día me encerraron en un auto con vidrios oscuros mientras robaron las cintas y todo lo que pudieron. Luego me maniataron, me amenazaron con mi hija y con mi vida y me llevaron por la orilla del Lago Calafquen a Panguipulli solo diciéndome que debía entregar las armas que guardaba en los instrumentos de la Orquesta Sinfónica de niños que dirigía. Fueron órdenes superiores según supe después, de jueces y fiscales. Los malos tratos y la tortura sicológica no me calzaban en su gobierno. Sé que usted lo vivió en su momento. También sé que usted fue una mujer comprometida con la historia así fue que llegó a la presidencia”.

Desde niña he llevado en mi memoria los tristes momentos de la dictadura y las mágicas palabras de Salvador Allende, su lucha y su respeto por el pueblo. De allí que quiero un país donde pase el hombre libre para reconstruir nuestra historia. Eso es para nosotros los chilenos y para nuestro respetado pueblo hermano Mapuche que sufre el atropello y que no tendrá dignidad hasta el día en el que se respeten sus derechos.

Estimada presidenta estoy acusada y enfrento una posible condena a quince años de cárcel por pensar así. Y aún no creo que esto esté sucediendo en la realidad de Chile actual. Luego de mi detención viví la fría y oscura cárcel injustamente, lugar de sacrificio del espíritu humano, lugar donde van a dar las penas más grandes de nuestra sociedad. La tristeza, la soledad y el nadaísmo. Así como seguramente usted vivió los horrores de la cárcel y de la tortura en dictadura. Aun hoy día en democracia, le cuento con mucho respeto, que en la cárcel, los presos caminan sin vida. Aunque algunos presos merezcan un lugar oscuro, nada evoluciona en ellos, es solo basurero para la humanidad. Así se vive la cárcel. Qué injusticia es entonces el encarcelamiento para quienes luchan por sus derechos, para quienes piensan distinto y tienen la conciencia social más arriba que el resto o son de otra raza y pertenecen a otros pueblos en busca de su dignidad.

He vivido la crueldad de su gobierno democrático, he vivido la persecución y la soberbia de quienes juzgan y encarcelan arbitrariamente. Estoy escribiendo una carta a usted gracias a la lucha por la verdad y la libertad de expresión que realizaron mis colegas y porqué no decirlo, mis compañeros.

No me han dejado trabajar en la película ya que debo permanecer tres semanas en Santiago y una sola en el sur. No he podido vivir en mi propia casa y hoy día vivo en casa de familiares. No he podido realizar mi labor de madre, me ha resultado difícil explicarle a mi hija, que sufre la misma “condena” sin comprender cómo su madre, de documentalista y de trabajar con la comunidad del sur de Chile, ha aparecido en los diarios como delincuente y como terrorista. No tengo donde estar, pero no me han vencido y no me vencerá el terror. Tengo mi voz para decir lo que pienso y lo que siento y a mis compañeros que reclaman los derechos a una vida justa y el derecho de vivir en paz.

Querida Presidenta, en nombre de cualquier valor superior al poder que le sostiene, le pido medite y ponga su mano justa. Porque si hay un valor que tienen los presidentes que luchan por una sociedad justa es el respeto a los derechos humanos y la magia de una sociedad mejor, con valores como la libertad de expresión, la igualdad, el reconocimiento a nuestros pueblos indígenas, el respeto a la creación. Es por estos valores que siendo yo una simple mujer armada de una cámara, con una batuta y acompañada de su hija se fue al sur, hoy estoy siendo acusada y enfrento la prisión. ¿Hasta donde llega el poder opresor?, ¿Hasta cuando puedo decir la verdad sin que me encarcelen?

Le solicito con urgencia mi libertad, la entrega y devolución de todo mi material audiovisual para terminar ambas películas y se me permita trabajar libremente por tierra mapuche junto a mis compañeros audiovisualistas de todo el mundo. Porque somos miles los que deseamos filmar el registro de nuestra sociedad, la lucha de los pueblos de América latina y esto hace de nuestra labor una emergencia llena de pasión y una misión histórica y política para la paz.

Mi fuerza arranca de que …”más temprano que tarde se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre”.., el hombre que piensa, el que escribe, el que ama, el que lucha por sus derechos, el que pide libertad. Y es por esto en nombre de lo añorado y los que han quedado en silencio o evadidos por el tiempo, le escribo.

Sin otro particular y por la libertad y la esperanza que es lo último que se pierde.

Se despide fraternalmente.
Elena Varela López
Cineasta – Documentalista
Presa Política


Reino Unido publica lista de visitantes que tienen prohibida la entrada al pais

Reino Unido publica lista de visitantes que tienen prohibida la entrada

El anuncio fue realizado por el ministerio del Interior y entre los “no deseados” se encuentra la estrella del talk show estadounidense Michael Savage.
Islamistas extremistas, partidarios de grupos que proclaman la supremacía de una raza o los líderes de un grupo de skinhead rusos, entre otros, no podrán entrar en Reino Unido, pues podrían promover el odio, la violencia terrorista o actividades criminales graves, informó hoy el gobierno. En un anuncio sin precedentes, el Ministerio del Interior publicó algunos de los nombres de una lista de personas “least wanted” (no deseadas), que no pueden entrar en el país desde octubre.

“Al ponerles nombre la gente puede ver el tipo de comportamiento inaceptable que no queremos en este país”, dijo la ministra del Interior británica, Jacqui Smith.

La lista incluye a Yunis al Astal, un diputado de Hamas, al extremista judío Mike Guzovski o a la estrella de talk show estadoundiense Michael Savage (llamado Michal Weienr), cuyos comentarios sobre la inmigración, el islam, la violación y el autismo causaron escándalo en Estados Unidos.

En la lista también se encuentra el pastor baptista estadounidense Fred Waldron Phelps, que condenó la homosexualidad, su hija Shirley Phelps-Roper y dos líderes de una bamba de skinhead rusa, Stephen DonaldBalck y Erich Gliebe.

“Venir a este país es un privilegio. No queremos dejar entrar a gente que vaya a propagar ese tipo de visiones (…) que atentan contra nuestros valores”.

La publicación llega después de que el gobierno endureciera las leyes de inmigración el pasado octubre que permiten al gobierno emitir una “presunción en favor de la exclusión”.

La lista nombra a 16 de las 22 personas a las que se prohibió entrar en el país. Según Smith, la publicación del resto no era de interés público.

[url=http://www.latercera.com/contenido/678_124883_9.shtml]http://www.latercera.com/contenido/678_124883_9.shtml[/url]

Una pareja francesa prohíbe comer a hijos para purificarlos

[url=http://www.elmundo.es/elmundo/2009/04/15/internacional/1239781320.html]
[/url]Una pareja francesa ha sido detenida y puesta a disposición judicial por haber maltratado a ocho de sus nueve hijos. No tenía costumbre de alimentarlos porque el patriarca, de origen marroquí y “musulmán estricto”, tal como él mismo ha confesado, sostenía que la delgadez extrema era una prueba de la buena educación y de la purificación corporal. Cuanto más se ayunaba, más se privaba al organismo de las necesidades mundanas.

Así es que las criaturas, de 7 a 17 años, estaban absolutamente desnutridas, muertas de hambre. De hecho, la policía descubrió el escándalo porque uno de los miembros del clan -13 años, 1,65 metros, 32 kilos- rebuscaba entre las basuras para alimentarse, y lo hacía a escondidas. No porque se avergonzara, sino para esconderse de la vigilancia de su padre.

Las condiciones de salud de otros hijos han exigido la hospitalización. Empezando por dos chicas de 13 y 15 años que pesaban 22 kilos y cuyos cuerpos esqueléticos denuncian ahora el delirio de los progenitores.

Ha ocurrido la escabrosa noticia en Banyuls-sur-Mer, muy cerca de Perpignan y apenas a tres kilómetros de la frontera española. Es allí donde el fiscal competente, Jean-Pierre Dréno, ha denunciado que la pareja en cuestión torturaba con excusas religiosas a la prole. Privándola de comida y sometiéndola otras veces a toda suerte de castigos corporales.

“Mis hijos necesitaban purificarse. Esa es la razón por la que hemos decidido privarlos de la alimentación”, objetaba el padre, de 50 años, una vez comprobada la degradación en que se hallaba la familia.

La policía ha descubierto que la cocina del hogar estaba sellada con candados y cadenas. Nadie podía acceder a las llaves en sin permiso paterno, aunque está pendiente aclararse las razones por las que sólo uno de los nueve hijos se alimentaba con regularidad.

[url=http://www.elmundo.es/elmundo/2009/04/15/internacional/1239781320.html]http://www.elmundo.es/elmundo/2009/04/15/i…1239781320.html[/url]

Sobre la religion

Parece ser que cierta gente, especificamente Cath y en menor grado Yusuf, se sienten molestos al ver temas e informacion que cuestionan los cimientos de la religion, algunas veces mencionan religion Cristiana, otras veces Musulmana.
Lo que si es claro es que si alguien que entra a un foro llamado Rojo Intenso donde la tematica es Nagualismo, debe estar consciente que su modo de ver la vida puede ser cuestionado y/o sancionado (no de sancion) y/o probado.
Los Naguales en el folklore popular siempre han tenido que ver con una posicion anti iglesia. Y algunos delicuentes tomaban eso de pretexto para cometer delitos.
[url=http://nahual.org/mitos.html]http://nahual.org/mitos.html[/url]

Porque molestarse al ver articulos e informacion de terceras fuentes que cuestionan a la religion? Porque quejarse?

Ni siquiera cuando estaba una verdadera catolica sectaria y hasta fundamentalista como mi exesposa hubo tales discusiones.

Porque molestarse cuando uno solamente pide respeto a sus derechos basicos de libertad?

Decir Nuestra señora de Guadalupe es una sutil invasion al derecho basico de libertad. Convivi con sectarios de manera cercana que imponian a base de un sistema y en las primeras fases de tal sistema nunca vi tales sutilezas. Al final ya estaba bien sometido y fue diferente.

Como sea la verdad ahi esta.

Libertad.
Deber.
Honor.

El timo de la religion

Un timo es la “acción y efecto de timar”, y por timar debe entenderse, en su acepción general, “quitar o hurtar con engaño”. Pero, en un sentido más específico y relevante, timo significa “engañar a otro con promesas y esperanzas” (DRAE). En esta clase de engaños existe una subclase especialmente dramática, en virtud del alcance y las consecuencias que puede tener en la vida personal de los timados. Me refiero al timo de la religión.

Lo que en este timo resulta definitorio consiste en prometer algo que es de toda evidencia contra natura: la negación de la muerte y la afirmación de una felicidad plena. Por esta razón nuclear y fantástica, y por algunos de sus corolarios, al timo religioso le ha cabido el honor histórico de ser el padre de los demás timos, y así, el más pernicioso, pues su engaño descansa sobre el mito más irreal generado por la mente humana: el de la existencia de almas y espíritus inmateriales como entes reales, y también de sus derivados, los dioses de los politeísmos, el Dios de los monoteísmos y los espíritus de los panteísmos.

Para que ocurra un timo se precisa una relación de engaño entre dos sujetos: el timador y el timado. Y además se requiere un referente que especificará la naturaleza concreta del engaño. En esa relación, el oferente promete lo que en la fase profética de la religión se llamó la salvación personal, porque está asistido por Dios o el gran Espíritu y cuenta con su delegación. Es decir, actúa por procuración divina o parte ya como un redentor divinizado que ostenta el poder de cumplir la realización de las promesas pactadas. Porque el vínculo personal constituido por la fe religiosa es un contrato sinalagmático (del verbo griego synallásso o synallátto: unir, pactar, conciliar), por el cual el oferente propone al ofertado una especie de trato jurídico recíproco que obliga a ambos al cumplimiento íntegro de lo prometido, de modo que, en caso de incumplimiento, las partes asumen la condición de felones según quien sea o no el culpable de la ruptura.

[url=http://rebelion.org/noticia.php?id=83658]http://rebelion.org/noticia.php?id=83658[/url]

El error Ratzinger se agiganta

El reportaje es del mes pasado, pero me pareció interesante… no se si se ha dado anteriormente el caso de que se pida la dimisión de un Papa (que lo hayan matado con más o menos sigilo para poner a otro en su lugar, es otra cosa). Consideré que era demasiado largo para ligarlo a otros tópics.

Edito: La fuente es el periódico “El País” [url=http://www.elpais.com/articulo/sociedad/error/Ratzinger/agiganta/elpepusoc/20090329elpepisoc_2/Tes]http://www.elpais.com/articulo/sociedad/er…elpepisoc_2/Tes[/url]

El error Ratzinger se agiganta

Pocos confían ya en Benedicto XVI – Sus anacrónicas decisiones muestran un Papa rodeado de una curia inoperante e incapaz de conducir la maquinaria vaticana.

MIGUEL MORA – Roma – 29/03/2009

No se apaga el tam tam de los tambores. Tras su periplo africano y la encendida polémica sobre el sida y los preservativos, afirmar que Joseph Ratzinger es un papa cada vez más cuestionado es una obviedad. Fuera de la Iglesia, no cesan las críticas y los ataques. En Francia y Alemania, las encuestas entre católicos registran ya la palabra “dimisión”, y Gobiernos, ciudadanos y ONG dejan ver su abierto descontento. Dentro del Vaticano, las cosas están igual. O peor. El Papa alemán fue elegido por los cardenales por su alta inteligencia. Pero, como dice el veterano vaticanista y escritor Giancarlo Zizola, “estos primeros cuatro años de papado sugieren que, por mucho que su inteligencia sea finísima, no le llega para gobernar la Iglesia”.

“Ratzinger es un prisionero de la curia, vive en una especie de Aviñón en patria, alejado de los episcopados nacionales, sin más apoyo que el de su pequeña camarilla”, explica Zizola, autor del libro Santità e potere. Dal Concilio a Benedetto XVI. El Vaticano visto dal interno. Filippo di Giacomo, sacerdote y periodista, 11 años de misionero en el Congo, hoy juez vicario en Roma, cree que la crisis que vive el Vaticano “refleja una enfermedad crónica desde hace siete siglos: su sistema de Gobierno no funciona ni es colegial”. “La curia moderna es una maquinaria gigantesca, inoperante e inútil. Hay 35 cardenales en Roma. Están divididos en grupos, enfrentados, y se dedican a conspirar y a cooptar afines por los pasillos”, señala Di Giacomo.

Se trata de una batalla en toda regla, en la que los bandos se mezclan y se confunden. La revuelta estalló con el perdón a los obispos lefebvrianos. Un grupo amplio de obispos y teólogos moderados y conciliares (alemanes, franceses y latinoamericanos, sobre todo), hartos de no ser tenidos en cuenta, hizo ver su descontento al Papa. En respuesta, éste reprendió a la curia por no actuar de forma “colegiada y ejemplar”.

Zizola recuerda que Wojtyla intentó obviar una fractura que ya existía a base de carisma y comunicación. Su papado creció con la televisión y se convirtió en una especie de Show de Truman, la primera encíclica catódica: le vimos envejecer, derribar el muro de Berlín, sufrir atentados, viajar, besar los suelos del planeta varias veces, agonizar en directo. Pero tampoco él fue capaz de reformar el sistema de gobierno. “Prefirió escaparse de Roma y tapar la crisis de la Iglesia y el vacío de gobierno”, dice Zizola.

Mientras Wojtyla viajaba, Ratzinger estudia y escribe. Mucho más aislado y a la defensiva, el Papa soporta mal que le lleven la contraria. Su carta a los obispos reveló que le disgusta sobre todo el desamor, la intriga, “el odio y la hostilidad”. Su texto dibuja a una curia conspiradora, que aspira a mandar tanto o más que él, que mueve los hilos en la sombra, que filtra noticias, escondiendo la mano, para hacerse valer. La peculiar sensibilidad de Ratzinger es una parte del problema. ¿Se trata de un “pastor alemán” como tituló Il Manifesto cuando fue nombrado, o “un cordero en medio de los lobos”, según la expresión del Evangelio de Mateo?

Di Giacomo despachó con él a menudo cuando dirigía la Congregación para la Doctrina de la Fe: “Le puedes decir cualquier cosa, siempre que no subas la voz. Si la elevabas medio tono, ponía su extraña sonrisa, cerraba el cuaderno y se marchaba. Delante de él no se puede ofender a nadie. Es un democristiano bávaro, y los democristianos bávaros son raros. Pueden tener ideas avanzadas, pero si los demás no les siguen, se asustan y frenan. Ratzinger es cualquier cosa menos un aventurero. Por eso se fue de la Universidad de Tubinga el día que se encontró a los estudiantes protestando tirados en el suelo. Es un monje, y nadie le ha dicho a tiempo que el mundo mediático no es un aula universitaria”.

En un texto publicado por la revista religiosa Il Regno, Zizola ha recordado que en 1965 el obispo brasileño Helder Camara anunció al mundo durante el concilio la reforma de la monarquía pontificia, creando un senado compuesto por cardenales, patriarcas y obispos, elegidos por las conferencias episcopales, para ayudar al Papa en el gobierno y convocar cada 10 años un concilio ecuménico.

La reforma nunca se hizo. La curia, la corte púrpura, ese ente invisible y lujosamente vestido, cuyo poder sobrevive a los papas, jamás aceptó la democratización. Hoy, dentro de la curia, nadie se fía de nadie. Por un lado están los influyentes hombres “del servicio”, como se autodenominan los diplomáticos de la secretaría de Estado que dirige Tarcisio Bertone, el único que despacha a diario con Ratzinger; por otro, los intelectuales orgánicos (periodistas, profesores, juristas, rectores…), unos papistas y muchos no; y luego está la variopinta macedonia cardenalicia y episcopal que dirige los dicasterios: nueve congregaciones, 11 consejos pontificios, tres tribunales, tres oficinas. “En los dicasterios están los casos piadosos”, dice Filippo di Giacomo.”Desde Pablo VI, el Papa que internacionalizó la curia y la llenó de excelencia con los mejores cerebros de ese tiempo, la decadencia del equipo de gobierno ha sido imparable. Wojtyla llegó a Roma en 1978 lleno de odio contra la curia, porque nadie escuchaba a los obispos del este de Europa, y se trajo a todos los fracasados, a los que no servían a las diócesis”, cuenta Di Giacomo. “López Trujillo, Castrillón Hoyos, Martínez Somalo, Martino, Barragán, Milingo… Gente insignificante. Luego hizo obispo a su secretario, y le dijo: ‘A estas bestias trátales tú”.

¿Podrá este Papa más tímido aún apaciguar a ese rebaño de “gálatas que muerden y devoran”? Según Zizola, “el Papa trabajó durante el Concilio en la frontera de la renovación y sabe que el gran problema es la nula participación de los obispos en el gobierno de la Iglesia. Algunos cardenales recuerdan que los obispos eran consultados más a menudo en la época de Pío XII, antes del Concilio, que actualmente”.

Cerca del Papa, coinciden Zizola y Di Giacomo, está el desierto. Cuatro monjas estadounidenses que dirigen el departamento informático y evitan que los hackers entren en la web. Su secretario, el guapo, alto y bávaro Georg Genswein, considerado un cero a la izquierda -“Es un cretino”, afirma sin tapujos un miembro de la curia-. El portavoz, el amable jesuita Federico Lombardi, y sus dos ayudantes, que no dan abasto a apagar fuegos, y que según se dice serán sustituidos en junio.

Los hombres de confianza son aún menos. El cardenal alemán Lehman, que culpó del desastre Williamson a los mensajeros; Bertone, el secretario de Estado, que también dejará su sitio pronto por edad. Antonio Cañizares, prefecto de la estratégica, según la visión de Ratzinger, Congregación para el culto divino. Y el lituano Audrys Juozas Backis, que suena para sustituir a Bertone. Demasiado poco para un hombre de 81 años con una enorme carga de trabajo. “El grado de complejidad del cargo, con 1.100 millones de católicos, 6.000 obispos en activo, relaciones ecuménicas e interreligiosas, viajes, encíclicas, y relaciones de Estado, es insostenible para un hombre solo, inteligente como Ratzinger o carismático como Wojtyla”, dice Zizola.

Por eso hay muchos obispos en guerra. Mientras Ratzinger salta de un pantano a otro, la iglesia moderada, progresista y conciliar no aguanta más. Según Zizola, el poder del Opus Dei, como en tiempos de Wojtyla y Navarro Valls, sigue siendo enorme. Di Giacomo no cree que sea tanto. Pero la máquina de enredar está en marcha. Con el perdón a los lefebvrianos, el Papa ha despreciado a las corrientes de signo opuesto, especialmente a la Teología de la Liberación, que él mismo frenó hace 25 años. Al fondo, se habla ya de un posible sustituto, el cardenal hondureño Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga. Pero eso lo decidirá la curia.