Cuando Julio diana comenzó a llegar drogado a las reuniones de los azulejos hubo una en especial en la que se puede decir me comenzó a echar ojo.
Mi madre lelgó a ir a una de esas reuniones, y en esa ocasión Julio diana comenzó a decirme que como Alfonso Orozco no lelgaba sería mejor que fuera pensando en otros caminos.
Que como sabía que me gustaban las artes marciales, sería bueno ahcer algo de zen.

Me decía que estuvo con un monje zen, y que el entrenamiento consistía en lavar trastes. Hasta mi madre me comentó, -pues si quieres entrenas comineza por los platos de la casa-

Yo me quedé intrigado y le pregunté varias veces a Julio diana como llegar con el maestro. Que sonaba interesante eso del zen, y que quería ir con el maestro.

Siempre me dio evasivas, incluso cuando le dije directamente : Si quiero ir al zen se llegó a sentir molesto y comenzó a cambiar el tema. Decía que había caminos más afines a mi persona, que el había dejado el zen y que encontró en el nagualismo una senda mas completa. Que debería seguirla con el.

Pasó la reunión, y en las semanas posteriores Julio diana me escribía a mi correo personal invitándome a “conocer verdaderos naguales” alumnos directos de Carlos castaneda.

Cuando le preguntaba directamente que personas eran, y como podía conocerlas, me daba evasivas.

Era raro, primero me contaba que conocía un grupo de personas que valía la pena conocer y cuando me interesaba para ir a conocerlas, me decía que no se podía conocerlas o accesarlas, más que siendo presentado por el.

Algo no me cuadraba, pero no se me hacía algo de temer o un foco rojo.

Hubo otro mensaje en donde me dijo que Alfosno orozco era un mentiroso, una persona que inventaba historias, que trataba mal a la gente.
Que debido a que me habia hablado, según julio diana, fuerte, el me sentía lástima y que yo debería expresar mi descontento.
Que tenía un proyecto próximo a salir y que me estuviera atento por si mi interesaba participar en el.
Que nua parte del proyecto tenía que ver con unas cartas para adivinar el futuro, basado en el calendario antiguo mexicano y que otra más importante no me la podía decir.

Psaba el tiempo, y en otra ocasión Julio diana me mandaba correos insistiendo en que Alfonso Orozco era una persona del a cual debía alejarme, que no era Nagual, porque era bien sabido que un Nagual era una persona que se aprecía en sueños, que una persona común al ver un nagual real se cagaba en los calzones y tenía un enorme poder personal.
Que tuviera paciencia porque ya tnedría oportunidad de ingresar a un proyecto, si me llegaba a interesar, en donde iba a poder aprender mucho.

Y se dio un día que soñe con Alfonso Orozco, y siguiendo el razonamiento de Julio diana le comuniqué mi experiencia. Con la inocencia de comprobarle que Alfonso si era nagual.
Se limitó a decirme que los vampiros también se le aparecían en sueños las personas débiles e inocentes y que incluso Sai baba, uno de los mas farsantes de la historia según Julio diana, tenía la misma fama de aparecerse en sueños.

Fue la gota que derramó el vaso, Julio diana no solo presentaba un comportamiento anómalo de insistirme en acercarme a él, sino que también no seguía sus propios razonamientos y además nunca me dijo nada de su tal proyecto o de su grupo de gente especial o de sus maneras especiales de acercarme al conocimiento.

Y fue cuando pedi la consulta de Alfonso Orozco.

Julio diana se sintió muy molesto y me dijo que sentía que había traicionado un secreto que nada mas era entre nosotros dos, que era un secreto que no debía haber contado a personas farsantes, y que por tanto ya no me iba a hablar.

Poco después pasó la historai de las otras identidades de Julio diana como Yaxkux, Artemisa y demás fácilmente reconocibles por sus mensajes de intetar reclutar personas para su proyecto especial.

Y así fue como me intnetó tentar Julio diana.